Los servicios de carsharing han revolucionado nuestra forma de desplazarnos, ofreciendo una alternativa cómoda y ecológica al alquiler de coches tradicional. Aunque tienen muchas ventajas, como la rentabilidad y la facilidad de acceso, el carsharing también conlleva un conjunto único de tasas que pueden pillar desprevenidos a los usuarios desprevenidos. Normalmente, puedes encontrar esta lista de tarifas y los importes correspondientes en el sitio web del proveedor de carsharing. Hemos hecho un resumen de las tarifas más comunes del carsharing, que pueden afectar inesperadamente a tu presupuesto, y compartimos prácticas estrategias para evitarlas.
Con SHARE NOW no tienes que preocuparte por los gastos de aparcamiento. Trabajamos con las autoridades locales para crear un área de "aparcamiento gratuito", conocida como zona operativa. Por supuesto, tienes que respetar las normas generales de aparcamiento, incluso en la zona operativa. Ten en cuenta que si decides aparcar en un parking de pago, el proveedor de carsharing no cubrirá el coste (a menos que se especifique lo contrario). El aparcamiento deja de ser gratuito en cuanto sales de la zona operativa. Si aparcas el coche fuera de la zona operativa (visible en la app), se te cobrará una "tasa de zona extra" además del coste de tu viaje. En general, esto se debe a que el coste de devolver el coche a la zona operativa es elevado y lleva mucho tiempo. Recuerda ser considerado con el siguiente usuario y aparcar sólo donde esté permitido.
Con el auge de los coches eléctricos, muchas empresas de carsharing los ofrecen ahora como parte de su flota. SHARE NOW incluso tiene ciudades que son totalmente eléctricas (p. ej. Ámsterdam). Y aunque recargar y comprobar los niveles de batería se ha convertido en una rutina para la mayoría de los usuarios, los niveles de batería no son infinitos. Pues existe la tasa por batería baja, que puede imponerse si dejas el coche con la batería vacía. Como cargar el coche sigue siendo una tarea mucho más laboriosa que echar gasolina, esta tasa suele cobrarse para cubrir el coste del personal dedicado y los posibles gastos de remolque en caso de que la batería del coche se agote por completo. Por tanto, sé amable con los demás usuarios, y recuerda enchufar el coche después de tu trayecto. ¡Incluso puedes ganar crédito haciéndolo!
Los gastos de grúa son la pesadilla de todo usuario de carsharing. Por desgracia, es una tasa sobre la que las empresas de carsharing no tienen influencia directa. La mejor manera de evitar sorpresas desagradables por parte del ayuntamiento es comprobar siempre las normas y restricciones locales de aparcamiento, los límites de tiempo existentes o incluso la normativa específica de cada evento. Cuando aparques tu vehículo de carsharing, sigue siempre las normas de la ciudad por la que circules. Lo que está permitido en Berlín, puede estar prohibido en Hamburgo. Ignorar las señales de aparcamiento o infringir las leyes de estacionamiento es una forma segura de que te lleve la grúa, lo que significa que las tasas asociadas suelen ser responsabilidad del usuario. Para evitar esta tasa, familiarízate con las normas de aparcamiento de la ciudad por la que conduces.
Perder la llave de un coche puede ser un costoso quebradero de cabeza al alquilarlo. Por suerte, muchos servicios de carsharing utilizan tecnología de acceso sin llave, eliminando el riesgo de este gasto concreto. En este caso, el acceso suele funcionar a través de la aplicación del proveedor. Asegúrate de leer nuestro artículo dedicado en el blog para saber más sobre las llaves digitales y por qué son el futuro. Y recuerda, familiarízate siempre con el sistema de entrada del coche antes de salir.
Si utilizas un servicio de carsharing para ir o volver del aeropuerto, es posible que te cobren un suplemento de aeropuerto además del coste del viaje. Es esencial que sepas que esta tasa suele cobrarla el aeropuerto, y no la empresa de carsharing. Esta tasa suele cubrir el coste del uso de una plaza de aparcamiento exclusiva en el aeropuerto o cerca de él. No hay mucho que puedas hacer para evitar este pequeño recargo, y a la mayoría de la gente le merece la pena, ya que puede evitar la molestia de llevar equipaje pesado en el transporte público o un viaje caro en taxi.
Recuerda que, aunque no puedes controlar todas las comisiones, hay algunas medidas sencillas que puedes tomar para reducir el impacto de algunas, haciendo que tu experiencia de carsharing sea más agradable y económica. Así que, la próxima vez que te embarques en una aventura de carsharing, hazlo con confianza, sabiendo que tienes las herramientas para evitar sorpresas no deseadas.
Sr. Digital Content Strategist
"Apasionada de los gatos... ¡y de los coches!"
Cuando el gato no está ronroneando, Nicky escribe sobre movilidad.